La importancia de la auditoría de seguridad en las empresas

Es indiscutible que la tecnología juega un papel relevante para cualquier empresa, sea cual sea su tamaño. Si tenemos en cuenta la gran cantidad de datos que se almacenan en los equipos, la información debe de tener tanta protección como otros aspectos del negocio. De ahí que este punto sea uno de los focos en una auditoria de seguridad.

En este artículo, presentaremos qué es una auditoría de seguridad y cómo puede contribuir a la protección de tu negocio, tanto en lo físico como en lo digital.

¿Qué es una auditoría de seguridad?

Una auditoría de seguridad es un análisis exhaustivo de los riesgos, vulnerabilidades y fortalezas del sistema de protección de una organización.

La finalidad principal de una auditoría de seguridad es valorar el actual estado de la protección de las instalaciones y la presentación de propuestas para incrementar la seguridad de las mismas y sus procesos.

Entre otras cosas, se analizan las medidas de seguridad que están en funcionamiento, con el fin de mejorarlas. Este trabajo engloba vulnerabilidades y protecciones a todos los niveles, incluido lo digital, por lo que se trata de una herramienta integral y transversal para cualquier negocio.

En una auditoría de seguridad se analizan:

  • Medidas físicas pasivas: vallados, muros, ventanas, puertas, etc.
  • Medidas técnicas: sistemas de CCTV, sistema de detección de intrusión (IDS), sistema de control de accesos, sistema de comunicaciones, equipos de revisión, etc….
  • Medios humanos: operativo de vigilancia, puestos y horarios, perfiles.
  • Material auxiliar con el que cuenta el servicio de vigilancia.
  • Medidas organizativas: estructura, dimensionamiento, dependencias, gestión de las comunicaciones, ordenes de puestos, etc.
  • Medidas procedimentales: funciones y procedimientos de actuación, protocolos, etc.

Tipos de auditorías de seguridad

La auditoría de seguridad integral puede clasificarse en distintas tipologías, en función de cómo se realice. Y es que no es lo mismo centrarse en aspectos específicos de la seguridad que abordar el conjunto de las estrategias de la empresa. También existen diferencias según quién desarrolle este trabajo. Por estos motivos, es importante conocer los diferentes tipos para saber qué opción es más adecuada según las necesidades y la situación.

Auditoría de seguridad por objetivos

Este tipo de auditorías son muy frecuentes, ya que responden a una necesidad concreta, como la expansión de una sección del negocio, la optimización de una medida de seguridad o la corrección de un problema. Para llevar a cabo esta auditoría, se pone el foco en un objetivo concreto, como la protección contra incendios o la mejora de la seguridad en un área específica, encontrando formas de optimizar las condiciones actuales.

Auditorías internas o externas

La diferencia entre una auditoría de seguridad interna y una externa es que La primera la realiza personal de la empresa, mientras que la segunda la lleva a cabo una entidad ajena a la organización. La decisión de externalizar una auditoria puede ser voluntaria u obligatoria, es decir, requerida por ley. Sin embargo, siempre es recomendable hacer una auditoría externa cada cierto tiempo, ya que los estudios y resultados son más objetivos.

Auditorías de carácter técnico

Las auditorías de carácter técnico abarcan campos más amplios, como puede ser la seguridad lógica de los sistemas de información, aunque también analizan la seguridad de la empresa en un espacio acotado de tiempo. De esta forma, se puede evaluar la seguridad de áreas críticas, como las infraestructuras tecnológicas.

Auditorías regladas

Son aquellas auditorías que se realizan contra una norma pública e internacionalmente aceptada, como por ejemplo auditorias de Intergraf o auditorías de Food Defense de la IFS . Esta tipología de auditoría lleva aparejado un régimen sancionador por no cumplimiento parcial o total de los términos y condiciones de la de la norma.

Auditorías no regladas

Son las auditorías que no están reguladas por ninguna norma internacionalmente aceptada, sino que se realiza en torno a la experiencia y conocimiento del propio auditor de la Ley de Seguridad Privada, y son en función del nivel de seguridad que espera alcanzar la empresa que se someta a la auditoría.

Cómo llevar a cabo una auditoría de seguridad

Hay una serie de pasos que deben seguirse en cualquier evaluación destinada a mejorar la protección de una empresa, independientemente de las circunstancias que la rodeen.

  1. Análisis de situación

Es necesario plantear qué objetivos se van a tratar, qué aspectos deben ser prioritarios en la auditoría y cuáles son los tiempos estipulados para obtener los resultados. Es decir, se trata de planificar el proceso antes de iniciar el análisis.

  1. Trabajo de Campo

Se realiza la toma de datos necesarios y la verificación de las condiciones de seguridad en la propia instalación objeto de estudio.

  1. Aplicación de la auditoría

Este es el corazón del proceso. En esta fase se examinan a fondo los aspectos definidos en el primer paso y verificados en el segundo paso. El objetivo es recopilar toda la información posible para identificar vulnerabilidades y posibles mejoras.

  1. Realización de Análisis de Riesgos

Los análisis de riesgos determinan cuáles son las amenazas que potencialmente tendrían un mayor efecto sobre el objeto del análisis, y sobre las que se debe actuar mediante la implantación de controles o medidas correctoras que neutralicen o aminoren su impacto en los activos a niveles asumibles por el cliente.

  • Existen diversas metodologías de análisis de riesgos, no obstante, independientemente del método seleccionado para el estudio, todos deben tener en cuenta los siguientes aspectos:
  • Definir el alcance del estudio, determinando los activos o intereses del cliente objeto del análisis.
  • Identificación de las amenazas potenciales que pueden actuar sobre los activos definidos para el estudio.
  • Identificación de los controles o medidas de protección implantadas en los activos, valorando su madurez, esto es, su nivel de eficacia en base a su tipología, estado y gestión.
  • Valoración del impacto que podría significar para el cliente que una amenaza se materializara sobre un activo.
  • Mapa de riesgos o representación gráfica de los valores del riesgo sobre los diferentes activos analizados.
  1. Visualización de conclusiones

Una vez que se haya desarrollado la auditoría de seguridad, toca  filtrar, organizar y presentar de forma visual los datos obtenidos, de manera que se puedan analizar los resultados y extraer unas conclusiones que permitan detectar los riesgos que estén fuera del rango de tolerancia admitido por el cliente y modificar las estrategias de seguridad de la empresa.

  1. Identificación de mejoras

A partir de las conclusiones, las personas encargadas de desarrollar la auditoría de seguridad, junto con la dirección de la empresa, deben trabajar de forma conjunta para identificar oportunidades de mejora y aumento del nivel de protección de las instalaciones objeto de estudio. El objetivo es corregir fallos, fortalecer la seguridad y garantizar que la empresa está protegida en todos los frentes.

  1. Resolución de problemas

Por último, es necesario implementar los cambios. En esta fase, es importante establecer un orden de prioridades para empezar por las áreas críticas detectadas durante la auditoría. Una vez que se hayan resuelto, se podrá avanzar en la aplicación de mejoras en otras áreas menos urgentes.

Ventajas de aplicar auditorías de seguridad integrales

Además de realizar esta auditoría cuando sea obligatorio, se recomienda implementar esta práctica de forma periódica. Las grandes empresas incorporan este proceso dentro de su sistema de gestión de riesgos, ya que ofrece una serie de ventajas. Estos son los principales beneficios de optar por una auditoría de seguridad:

  • Prevención de todo tipo de riesgos: laborales, físicos, financieros, digitales o ambientales, entre otros.
  • Anticipación ante posibles peligros que puedan tener lugar a causa de desgastes o fallos de seguridad.
  • Identificación de oportunidades de crecimiento en el ámbito de la seguridad.
  • Incremento de la competitividad, gracias a la reducción de riesgos y, por lo tanto, del impacto económico que conllevan.
  • Mejora de la imagen corporativa a nivel interno y externo.

La importancia de la auditoría de seguridad en la organización

Una auditoría de seguridad proporciona varios beneficios a una organización. La auditoría ayuda a identificar posibles riesgos y vulnerabilidades de seguridad, que pueden abordarse antes de que sean explotados. La auditoría también proporciona recomendaciones para mejorar las medidas de seguridad y reducir el riesgo de violaciones de seguridad. Una auditoría de seguridad física también puede ayudar a una organización a cumplir con los requisitos reglamentarios y los estándares de la industria.

Desde Prosegur Security, recomendamos realizar estas evaluaciones de manera regular. Y es que una auditoría de seguridad anual o semestral permite identificar errores, brechas y áreas de mejora. De esta forma, no solo se garantiza un alto nivel de protección, sino que también permite a la empresa crecer de manera segura y eficiente, sea cual sea su tamaño.