Normativa contra incendios: Todo lo que necesitas saber

Existe una normativa contra incendios que asegura la correcta instalación, utilización y mantenimiento de instalaciones activas contra incendios en tu negocio, pero que no solo determina los estándares en el uso de estos, sino también las obligaciones de las empresas que brindan servicios relacionados y las de las personas o comercios que las contratan.

Todo lo relacionado a la normativa se encuentra detallado en el RIPCI “Real Decreto 513/2017, de 22 de mayo, por el que se aprueba el Reglamento de instalaciones de protección contra incendios”. En este artículo, desgranaremos aquellos aspectos que son más importantes para las pequeñas y medianas empresas, incluyendo a las sanciones que se pueden recibir en el caso de no cumplir con la reglamentación.

El RIPCI indica cómo se deben realizar y mantener las instalaciones de protección contra incendios, pero la normativa que indica qué instalaciones debe tener como mínimo se determinan en:

  • Establecimientos NO Industriales se debe cumplir el Código Técnico de la Edificación, CTE y más concretamente su Documento Básico DB SI, Seguridad en caso de incendio.
  • Establecimientos Industriales se debe cumplir el RSCIEI (Real Decreto 2267/2004 de 3 de septiembre, Reglamento de Seguridad Contra Incendios en los Establecimientos Industriales).

El RIPCI indica las normas UNE de obligado cumplimiento, que son las normas que detallan cada tipo de instalación contra incendios. Además, según el tipo de riesgo y aseguradora es posible que se apliquen normas suplementarias de reconocido prestigio como puede ser: Cepreven, NFPA, FM Global, etc...

¿Existen más normativas y legislaciones en esta materia? 

Aunque este Real Decreto que hemos mencionado anteriormente es la normativa de principal aplicación en España, existen otros textos legislativos a nivel internacional, europeo y español que pueden sernos de utilidad a la hora de documentarnos sobre la normativa contra incendios. 

Normativa Internacional 

A nivel internacional, varias organizaciones han establecido estándares para la seguridad contra incendios. Entre las más influyentes se encuentran: 

  • NFPA (National Fire Protection Association): Establece códigos y normas reconocidos globalmente, como el NFPA 101 (Código de Seguridad Humana) y el NFPA 72 (Código Nacional de Alarmas de Incendios y Señalización). 

  • ISO (International Organization for Standardization): La ISO 7240 establece requisitos para sistemas de detección y alarma de incendios. 

Normativa Europea 

En Europa, la normativa contra incendios está regulada principalmente por la Directiva 2014/34/UE y la Directiva 2010/35/UE, que establecen requisitos para productos destinados a atmósferas potencialmente explosivas y transporte de mercancías peligrosas, respectivamente. Además, la EN 13501-1 clasifica los materiales de construcción según su comportamiento frente al fuego. 

Normativa en España 

En España, encontramos también el Código Técnico de la Edificación (CTE), en particular el Documento Básico de Seguridad en caso de Incendio (DB-SI). Este documento establece: 

  • Condiciones de evacuación: Requisitos para salidas de emergencia, señalización y sistemas de evacuación. 

  • Instalaciones de protección activa: Sistemas de detección, alarma y extinción de incendios. 

  • Compartimentación y resistencia estructural: Medidas para evitar la propagación del fuego y garantizar la estabilidad del edificio durante el tiempo necesario para la evacuación. 

¿Cómo cumplir correctamente con la normativa contra incendios?

Debemos comenzar por comprender que la reglamentación actúa tanto sobre los productos que se utilizan como también sobre las empresas que pueden ocuparse de la instalación y el mantenimiento de los mismos. Estas últimas son denominadas:

  • Empresas instaladoras.
  • Empresas mantenedoras.

Para cada una de ellas existe una serie de requisitos que determinan la habilitación, las obligaciones y las limitaciones en sus ámbitos de actuación.

Como usuarias de los servicios, las personas deben conocer los tres aspectos principales de la normativa vigente, que son los siguientes:

  • Se debe optar por las instalaciones activas contra incendios que mejor se adapten según el tipo de construcción y según el nivel de riesgo de incendio.
  • En caso de incendio, se debe permitir la salida de humo y limitar la propagación del fuego mediante una sectorización adecuada.
  • Se debe garantizar evacuación de las personas afectadas mediante la aplicación de la protección activa y pasiva. 

Medidas de protección contra incendios 

Hoy en día, existen numerosas medidas y sistemas de protección contra incendios que nos pueden ayudar en caso de emergencia. Veamos algunos de los más que más frecuentemente vemos en empresas y espacios públicos: 

Protección activa 

La protección activa contra incendios incluye sistemas y equipos que requieren una acción para funcionar en caso de incendio. Entre ellos se encuentran: 

  • Sistemas de detección y alarma: Detectores de humo, calor y llama, junto con sistemas de alarma que alertan a los ocupantes. 

  • Extintores: Equipos portátiles para apagar fuegos incipientes. 

  • Sistemas de rociadores automáticos: Redes de tuberías con rociadores que se activan al detectar calor. 

  • Sistemas de extinción por gas: Utilizados en áreas donde el agua puede causar daños, como salas de servidores. 

Protección pasiva 

La protección pasiva se refiere a las medidas integradas en la construcción del edificio para limitar la propagación del fuego y proporcionar tiempo para la evacuación. Incluyen: 

  • Materiales de construcción resistentes al fuego: Uso de materiales clasificados según su comportamiento frente al fuego. 

  • Compartimentación: Divisiones internas que evitan la propagación del fuego y el humo. 

  • Sellado de penetraciones: Uso de sellos y materiales resistentes al fuego en conductos y cables que atraviesan compartimentos. 

Planes de emergencia 

Un plan de emergencia debe estar claramente definido y comunicado a todos los ocupantes del edificio. Debe incluir: 

  • Procedimientos de evacuación: Rutas de escape, puntos de encuentro y responsabilidades del personal. 

  • Formación y simulacros: Capacitación regular y simulacros de evacuación para garantizar que todos sepan cómo actuar en caso de incendio. 

  • Sistemas de comunicación: Mecanismos para alertar a los ocupantes y coordinar con los servicios de emergencia. 

Señalización e iluminación 

La señalización adecuada es crucial para una evacuación segura. Esto incluye: 

  • Señales de salida de emergencia: Claramente visibles y bien iluminadas. 

  • Indicaciones de rutas de escape: Señalización que guía a los ocupantes hacia las salidas. 

  • Iluminación de emergencia: Sistemas que aseguren visibilidad en caso de fallo del suministro eléctrico. 

Datos sobre incendios en España

La Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA) elaboró un informe en el que se explica que en 2019 y 2020, el costo de los daños producidos por incendios fue de aproximadamente 8.768 euros en los comercios y de 14 veces más en las industrias, alcanzando un valor promedio de 42.081 euros.

Aunque no es un dato que alcanza todos los casos de incendios, ya que se estima un porcentaje de comercios e industrias correctamente aseguradas, sirve para comprender el alcance de la problemática que se desata en un incendio económico. 

Posibles sanciones por el incumplimiento de la normativa 

El cumplir con la normativa contra incendios no debería de ser pensado desde lo que sucedería si no lo hacemos, ya que, en el caso de un comercio, se trata de la seguridad de sus clientes y de las personas que trabajan en él. Aun así, vemos que el incumplimiento puede tener consecuencias importantes. 

En España, el incumplimiento de la normativa contra incendios puede conllevar diversas sanciones que varían en función de la gravedad de la infracción y de las consecuencias que esta pueda tener. Estas sanciones pueden ser administrativas (multas económicas, clausuras temporales o definitivas, retirada de liencias…), civiles o incluso penales, dependiendo del tipo de incumplimiento y de los daños causados. 

Optar por la empresa instaladora y mantenedora adecuada para los sistemas de protección es sumar seguridad y evitar problemas mayores.